Mientras avanza el paro minero, las autoridades ambientales denunciaron que 1.300 hectáreas de bosques han sido destruidas este año por la minería ilegal y la tala indiscriminada en el Nordeste y el Bajo Cauca antioqueño.
Corantioquia identificó este daño ambiental en 146 polígonos de 5 y 10 hectáreas, además, en otros seis polígonos de más de 10 hectáreas en lo corrido del 2023.
La principal causa de la deforestación de los 1.300 hectáreas este año es por la minería ilegal y la tala indiscriminada, además de cultivos e infraestructura vial irregular en municipios como Segovia, Remedios, El Bagre, Amalfi, Yondó, Vegachí, Puerto Berrío y Anorí.
“Estamos haciendo una alerta al departamento de Antioquia, a la sociedad y a las instituciones, frente a la pérdida acelerada de bosques que se ha acelerado especialmente en los meses de enero y febrero, en lo corrido de 2023”, explicó Marcela Ruíz Saldarriaga, subdirectora de Sostenibilidad y Gestión Territorial de Corantioquia.
Una de las zonas más afectadas es la Zona de Reserva Forestal del Río Magdalena, donde se concentran amplias zonas de bosque natural en el Nordeste y Bajo Cauca antioqueño en la serranía de San Lucas.