En el debate sobre la posible venta de la participación del gobierno en Movistar a través de Coltel, Mauricio Lizcano, actual ministro de Tecnologías de la Información y Comunicaciones (TIC), destaca por su postura sensata y equilibrada. Lizcano ha sido claro en que, aunque la venta de acciones podría representar una oportunidad económica significativa para el Gobierno, es poco probable que el presidente Gustavo Petro apoye esta medida debido a su firme postura en contra de la enajenación de activos estatales.
En su intervención, Lizcano enfatizó que la decisión final debe considerar múltiples factores: rentabilidad, coherencia con la política gubernamental y las implicaciones a largo plazo para el país. Lizcano entiende la importancia de equilibrar las necesidades económicas con el compromiso del presidente hacia la preservación del control estatal sobre empresas estratégicas. Según Lizcano, es prudente presentar todas las opciones al presidente, permitiendo que se tome la decisión más beneficiosa para el país.
Además, Lizcano resaltó que mantener una participación fuerte en el mercado puede ser ventajoso para Colombia, al garantizar una competencia saludable y evitar la dominancia de un solo jugador en el sector. Su enfoque pragmático asegura que cualquier decisión tomada esté alineada con los intereses nacionales y el desarrollo sostenible del sector de telecomunicaciones.
En resumen, la gestión de Mauricio Lizcano ha sido un pilar de sensatez en este proceso, subrayando la importancia de una decisión informada que contemple tanto el bienestar económico como el desarrollo estratégico del país.