Cocas plásticas en las que es empacado el jabón de loza; vasos y frascos de cristal, en los que se conserva el café; envases plásticos, latas de atún, tejas y cajones de guadua, empotrados en la tierra y amarrados con alambre dulce, son una muestra de la variedad de materiales usados como materas para sembrar plantas alimenticias en una de las huertas del programa de la alcaldía de Medellín, ‘Huertas Con Vos’, ubicada en el barrio Doce de Octubre, al noroccidente de la ciudad.
“Todo sabe más diferente sin químicos y sembrado con amor y dedicación. Todo. Nadie me creía, solo hasta que prueban los productos. Fuera de eso me ahorro 50.000 pesos del mercado al mes”, cuenta María Lucelly Ríos, de 58 años, una de las propietarias de la huerta urbana.
La huerta, que mide 270 metros cuadrados, aproximadamente, la comparte con otras cuatro familias que también trabajan en ella y se benefician de sus productos.
En ella cultivan zanahoria, lechuga, tomate, cebolla de rama y de huevo, cilantro, lechuga verde y morada, brócoli, plátanos y varias plantas aromáticas.Todo orgánico.
La dinámica para el cuidado de los cultivos está distribuida. Cotidianamente deben regar los cultivos en la mañana y en la tarde.
También organizan jornadas de limpieza y fumigación para la prevención de las plagas. Así mismo, se distribuyen la cosecha.
Todo sabe más diferente sin químicos y sembrado con amor y dedicación
Cada que esta se produce se la reparten entre todos los que trabajan e, incluso, alcanza para familiares, curiosos y hasta para comercializar o canjear con otras huertas.
“Lo que más me gusta es la lechuga y sale más rápido por el calor. Yo sé que se demora 40 días desde que la siembro, hasta que me la como”, dice Lucelly, acompañada de una carcajada de alegría.
Luego puntualiza que viene de una familia de campo y que por eso es que le gusta lo que hace.
Este programa, ‘Huertas Con Vos’, impulsado por la Alcaldía cuenta con el respaldo de las secretarías de Desarrollado y de Inclusión Social y Familia, y el equipo de Seguridad Alimentaria de Medellín.
El enfoque principal de las huertas, considerado un proyecto de innovación social, está dirigido a cambiar los planes asistencialistas de alimentos que tiene el municipio, por el de subsidios para la generación de oportunidades.
El secretario de Inclusión Social de Medellín Luis Bernardo Vélez, explica que las familias generan alimentos para su consumo y pueden comercializar los excedentes. De esa manera, agrega el funcionario, logran captar recursos y cambiar el modelo asistencialista que se tenía, por el de oportunidades e inclusión, para desarrollar una mejor sociedad.
Otros propósitos que busca la Administración Municipal es el de mejorar la alimentación de las familias y la comunidad, fortalecer el tejido social y comunitario, como lo están haciendo con otras huertas de la ciudad, haciendo que los productores se unan y creen asociaciones o redes para intercambiar alimentos y fortalecer, así, la parte de la comercialización.
Según el último estudio de la Administración Municipal, en Medellín hay cerca de 100.000 familias que necesitan una huerta o que presentan algún tipo de vulnerabilidad. Entre ellas hay 10.000 que ya fueron priorizadas para la atención desde los distintos programas de Seguridad Alimentaria.
Uno de los mayores orgullos de Lucelly, actualmente, es tener una de las mejores y más productiva huerta del sector El Progreso Número 2, barrio Doce de Octubre, sobre la base del cerro El Picacho.
Ella, antes, trabajó la mayor parte de su vida como representante de ventas de una comercializadora de higos del municipio de Sonsón, suroriente de Antioquia, en la Central Mayorista. Ahora es una de las pioneras de las huertas comunitarias.
El proceso para las personas que quieren acceder al programa es: primero, acercarse a las acciones comunales de cada barrio para hacer la solicitud; segundo, tener el tiempo y el espacio para sembrar; luego de salir beneficiada, uno de los delegados del equipo técnico de ‘Huertas con Vos’ conformado por 12 integrantes, programa una cita para la socialización; posteriormente, realizan una visita para verificar los espacios donde se puede cultivar.
Después de esto, inician los talleres formativos teórico prácticos que les transmite una formación completa sobre cómo hacer un cultivo viable y productivo, desde la concepción del proyecto, hasta la cosecha, su consumo y la comercialización.
Una vez terminada la etapa formativa, a las personas beneficiadas les entregan los insumos, las herramientas, los utensilios y las semillas necesarias para la siembra.
Los profesionales agrónomos realizan un acompañamiento técnico, con lo que garantizan que la huerta sea sostenible en el tiempo.
Otra premisa que caracteriza este programa es que todas las huertas son concebidas como agricultura limpia, los fungicidas e insecticidas utilizados (biopreparados), son fabricados orgánicamente a partir de productos naturales como el ajo, el vinagre, el bicarbonato, la ruda y hasta la ortiga.
Según el equipo técnico de las huertas, durante el 2018 serán implementadas 700 nuevas huertas, 250 rurales que incluyen 50 escolares e institucionales, y 450 urbanas. Para un consolidado de 1.707 huertas en tres años, tiempo que lleva el proyecto sembrando alimentos y sueños.
Fuente: eltiempo.com