El aumento en las pérdidas va en contra de la eficiencia de la empresa, incrementando los costos de operación y exige mayores inversiones.
Empresas Públicas de Medellín, informó que el consumo fraudulento de agua en el Valle de Aburrá y Rionegro, durante un año, equivale al suministro completo de un municipio como Bello durante 365 días.
Así mismo, explicaron que, al cierre de agosto del presente año, el valor del Índice de Pérdidas por Usuario Facturado IPUF, fue de 6,89 m3 por usuario al mes, con un valor de volumen que equivale a 117 millones de m3 durante el último año, y en cuanto al balance anual de pérdidas incluyendo fraudes y otras pérdidas de agua, representa “llenar” 10 veces el embalse de La Fe, en El Retiro.
Santiago Ochoa Posada, vicepresidente de Agua y Saneamiento de EPM, manifestó que el aumento en las pérdidas va en contra de la eficiencia de la empresa, incrementando los costos de operación y exige mayores inversiones en infraestructura, incidiendo en la tarifa que pagan los usuarios.
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Luisa Pérez, gerente Gestión Integral Sistemas Aguas EPM, el consumo promedio en las viviendas ubicadas en asentamientos informales del Valle de Aburrá, que obtienen el agua de forma fraudulenta, es de aproximadamente 29 metros cúbicos al mes por cada vivienda; esto significa que son 2,5 veces más altos que el consumo de un usuario que hace parte de la prestación del servicio legal.
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Desde la entidad explicaron que estas conexiones no autorizadas a la red de distribución de agua generan impactos más amplios que los económicos, pues afecta la intervención de la red, aumentando la cantidad de daños y fugas afectando la prestación del servicio por poca presión y un menor caudal disponible para los clientes.
El vicepresidente de Agua y Saneamiento aseguró que más de 40 mil viviendas del Valle de Aburrá y Rionegro se surten del sistema de acueducto de manera fraudulenta, lo que equivale a unas pérdidas de alrededor de 14 millones de metros cúbicos al año.