El 28 de mayo del presente año, más de 300 mil metros cúbicos de tierra, barro y sedimentos bloquearon la troncal del café en el sector de la quebrada Sinifaná en el corregimiento de Bolombolo, municipio de Venecia; esta debacle causada por el crudo invierno que azotó la zona esta agravando la situación económica de muchos municipios del área del suroeste antioqueño, pues la paquidérmica acción publica para mitigar la emergencia y abrir la vía ha causado que el costo del transporte de los productos agrícolas que se generan como el café haga inviable su venta y distribución a nivel nacional.
En ese orden de ideas, el 16 de agosto se convocó a una primera manifestación huelguística para que el gobierno nacional tomará medidas efectivas para atender la emergencia; el paro logro que, desde el gobierno, se declarara el estado de calamidad publica y para el 13 de septiembre la ANI y Covipacifico se reunieron en el corregimiento de Bolombolo con la comunidad afectada para escuchar y dar soluciones que hagan posible el mejoramiento de la malla vial, sobre todo la de la vía Camilo C, pero hasta la fecha no se ha acordado ni llegado a ningún acuerdo sobre esta problemática en una nueva reunión.
Esta situación de incumplimiento por parte del gobierno nacional ha llevado a los transportistas a promover una nueva jornada de paro y movilización social para el 21 de octubre; la Asociación de Comerciantes de Bolombolo y los lideres de los municipios del suroeste antioqueño, en palabras de uno de los integrantes del equipo de negociación entre el gobierno y los transportistas y comerciantes, el señor Fernel Velásquez, han manifestado su intención de llevar a cabo la movilización, pues sienten y han visto que no se han tomado las medidas necesarias para paliar la problemática:
“Estamos preocupados porque los acuerdos no se han cumplido, nos dicen que el derrumbe se retira en 6 meses, pero vemos nuevos deslizamientos que creemos alargaran la espera” Fernel Velásquez.
El punto de encuentro del cese de actividades de los transportistas y comerciantes será en el corregimiento de Peñalisa e iniciará a las 7 a.m. y esos son los motivos por los cuales van por las vías de hecho:
• No ha habido respuesta de parte de la ANI, ni la Gobernación de Antioquia, acerca del mejoramiento de la vía de Venecia.
• No hay respuesta acerca de la repotenciación del puente de Bolombolo, que permita el tránsito de todo tipo de vehículos.
• No hay mayor avance de las obras en el sector Sinifaná́ que faciliten la apertura de la vía tradicional; por el contrario, todo apunta a que el estado de este carreteable es peor, porque se han presentado deslizamientos en otros sitios.
• La declaratoria de calamidad pública decretada el 19 de agosto, por el estado de la troncal del café no ha conducido a establecer un plan de acción de parte del Departamento que agilice acciones tendientes a disminuir el impacto económico en la producción cafetera y en el comercio de la región.
Ahora bien, la protesta por la ineficiente acción del gobierno frente a esta problemática se justifica, pero una cosa es luchar por reivindicaciones validas por que el Estado no responde y otra muy distinta usar la catástrofe ambiental con fines electorales, como lo está haciendo la izquierda populista en cabeza del partido Polo Democrático Alternativo. En época de elecciones la izquierda de este país se empecina en ralentizar la labor de Gobierno Nacional con tal de sacar rédito político de cada situación que se presenta está apoyando la movilización para generar inestabilidad política ad-portas de las elecciones del 27 de octubre.
Este paro promovido por Robledo no es un paro que reclame por la entrega a tiempo de las obras o de su construcción, es un paro político que el único objetivo que tiene es desestabilizar al Gobierno, ¿por qué? porque los promotores, encabezados por Diego Piña, que son candidatos a alcaldía por el Polo Democrático Alternativo de muchos municipios del suroeste de Antioquia como Venecia y Salgar, que lejos de ser ingenuos, conocen muy bien la ley electoral que impide que se entablen conversaciones con funcionarios del Ministerio de Infraestructura, la Gobernación de Antioquia o la ANI hasta después del 27 de octubre.
Es decir, el calendario electoral le viene muy bien a Robledo y la izquierda sectaria para que plante su injusto reclamo de forma arbitraria, perjudicando la economía de todo el país. Tienen que dejar de usar los gremios para la política partidaria y plantear soluciones de fondo, y eso se logra promoviendo las negociaciones y llegando a consensos.